El alcalde de Mogán, Paco González entregó el premio a los dos vencedores y agradeció la participación y el esfuerzo que los cinco artistas han dejado plasmado en cada una de las obras de piedra. Aguirre ha explicado que su obra “muestra la ciudad que emerge del bloque bruto, creando una especie de oasis donde habita el hombre”. Canedo ha interpretado la fractura de la piedra, “como oficio primitivo y sagrado cuyas dos partes generan un nuevo volumen, una estela que se alza libre de arquitecturas para indicar un lugar señalado”.
Los otros tres escultores responsables de las piezas participantes en el certamen son José Carlos Olivencia, con la obra titulada “Mar y Hombre”; Fran Celis, con la pieza “Abranzado mis raíces” y Noemí Arrocha, con la escultura titulalda “La aguja”.
Las cinco esculturas de gran formato, forman parte del patrimonio cultural de Mogán y se ubicarán en diferentes puntos de la geografía del municipio, para que puedan ser contempladas por todos los vecinos y visitantes como un recuerdo permanente de los 200 años de historia del pueblo moganero.